Artículo de opinión del director de CMS MAG, Jorge Mediavilla
Hace unas semanas se me ocurrió que podía hacer algo por el barrio de Madrid en el que me crié. Allí existe una entidad pública municipal que acoge “actividades y eventos relacionados con el fomento de la innovación, la tecnología, la ciencia y/o el emprendimiento”.
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Visto que soy de los pocos en el mundo -que yo sepa- que está estudiando los gestores de contenidos web (CMS) y las plataformas de experiencia digital (DXP) desde un punto de vista holístico y transversal, les propuse hacer allí la segunda edición de mi máster de CMS y casi regalar algunas inscripciones a la gente del barrio.
La respuesta fue que mi propuesta no encajaba en su misión, no consideran CMS MAG algo innovador y tampoco yo debo ser muy de su interés como emprendedor (aunque te aseguro que hoy en día que un periodista emprenda con contenido y tenga relativo éxito tiene bastante mérito).
El objetivo de este artículo de opinión no es criticar a este ente municipal. No lo conozco en profundidad y, la verdad, tampoco me importa demasiado el rechazo. Si me hubieran aceptado tendría que cruzar toda la ciudad para impartir una clase prácticamente gratis a mis antiguos vecinos…
El objetivo es poner de manifiesto el tipo de innovación que se promociona habitualmente, ese en el que algo tiene que lucir, brillar o pitar, mientras que los esfuerzos de los emprendedores de “letras” no son considerados -en mi humilde opinión- como se merecen.
El objetivo es poner de manifiesto el tipo de innovación que se promociona habitualmente, ese en el que algo tiene que lucir, brillar o pitar, mientras que los esfuerzos de los emprendedores de “letras” no son considerados -en mi humilde opinión- como se merecen. Lo que hacemos en un entorno precario y ultra competitivo es realmente complicado.
Hace muchos años, en una empresa en la que trabajé, dieron un curso de innovación. No asistí porque tenía trabajo, pero a la salida un compañero me dijo que el curso le había cambiado un poco la perspectiva porque el profesor les había comunicado que innovar no es algo exclusivo de ordenadores cuánticos y coches autónomos. Cualquiera que haga algo nuevo o más eficiente se puede considerar innovador. Definitivamente no solo se innova en la ciencia…
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Innovar no es algo exclusivo de ordenadores cuánticos y coches autónomos. Cualquiera que haga algo nuevo o más eficiente se puede considerar innovador. Definitivamente no solo se innova en la ciencia…
En mi caso, prácticamente nadie en el mundo se dedica a lo mismo que hago en CMS MAG. Hay muchos que controlan mucho de WordPress, otros son verdaderos hachas de Drupal, otro grupo se ha certificado en Liferay, pero prácticamente nadie en el mundo estudia los CMS de forma transversal.
Innovadores son los contenidos de CMS MAG, el máster que he comenzado a impartir, el libro que pronto subiré a Amazon. También lo es el evento de CMS & IA que preparo para septiembre, AInnovación. Pero soy de letras, ese es mi pecado. Y vivo en un mundo en el que los contenidos no valen nada por obra y gracia de Google. ¡Ah! E innovador es el GPT para cambio de CMS que también es algo absolutamente único.
Este artículo, aunque lo parezca, no es tampoco para reivindicarme. Simplemente es para levantar el ánimo a todos los periodistas y creadores de contenidos que exploran nuevos formatos en la última red social o intentan contar una historia desde otro ángulo.
Este artículo, aunque lo parezca, no es tampoco para reivindicarme. Simplemente es para levantar el ánimo a todos los periodistas y creadores de contenidos que exploran nuevos formatos en la última red social o intentan contar una historia desde otro ángulo o con una infografía novedosa. ¡Esto también es innovar aunque no se imprima con impresora 3D!
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